Tri-Droide

El Tri Droide es una mejora del pequeño Droide Octuptarra, que se hizo con finalidad de reducir su costo. El Tri-Droide resultó ser una máquina asesina que podía destruir con facilidad cualquier tipo de vehículo, y era muy difícil de destruir. Era estéticamente igual que el Droide Octuptarra, solo que medía 20 metros de altura. Estaba armado con lanzadores de misiles de ordenanza y podía lanzar una media de 1 misil cada dos segundos. Cuando se diparaba un misil, la cabeza giraba y daba paso a que lo disparase otro cañón, mientras los restantes se enfriaban y se recargaban. Sus misiles eran muy potentes, mejorados de el Droide Hailfire, y de un tiro bien dado, podía derribar un UT-AT. Tenía un gran arsenal en el bulbo, que le permitía dispara sin reservas, reduciendo la infantería y los vehículos a escombros. El Tri- Droide poseía unas patas más largas que cualquier otro vehículo, que le proporcionaban una estabilidad excepcional y una vista panorámica del campo de batalla. Además, algunos modelos del tri-Droide tenía la posibilidad de trepar muros, y colocarse en una posición en la que ningún vehículo enemigo pudiera alcanzarle. Como la mayoría de los droides de los separatista, los Tri-Droides estaban dotados de un cerebro droide integrado. Participaron en la batallas de Chriptopsis bajo el mando del General Whorm Loathsom, y el la de Mygeeto, donde hicieron frente a Ki-Adi-Mundi y a los marines galácticos (poco antes de ejecutarse la orden 66). Posteriormente, todos fueron teóricamente desconectados, aunque algunos fueron vistos recientemente en planetas como Uba IV...